miércoles, 2 de septiembre de 2009

In Treatment




"In Treatment" es la penúltima obra maestra de la HBO. Fiel remake -según cuentan- de una serie israelita, volver a desplegar una nueva alfombra de alabanzas ante otra serie de tv de la cadena norteamericana puede resultar repetitivo. Dado su formato y tema, aparentemente poco atractivo para el gran público, lo mejor es invitar a que comprueben en carne propia, y prepárense, cómo pueden llegar a enganchar cuatro paredes y unos pocos personajes. La atractiva doctora (¡Oh, Melissa!). El piloto engreído. La adolescente gimnasta. La pareja con problemas. Y claro; Paul, y Kate, y Gina. Elijan Uds. Son todos fascinantes. Cuchilladas de realismo e intimidad a través de diálogos inteligentes y verosímiles –sin siquiera necesitar ser ingeniosos- que penetran con asombrosa adicción en la carne y la mente de un espectador atónito. Te dejan ansioso de más, anhelante de las próximas visitas de unos personajes que se hacen vivos, terriblemente cercanos. Asombra la simplicidad de la propuesta y lo adictivo de sus resultados. Y además es una obra de arte que invita a la reflexión, pues, ante tanta basura, ante tantas costosas producciones televisivas, ante tanto reality vacío de ficción, llega el baratísimo poder de la palabra, la verdadera vida reflejada en frases y miradas… y se coloca en el pedestal del lujo inteligente. Televisión que cautiva, que enamora. Claro que no hay que confundirse; imagino a docenas de productores y cientos de estudiantes de cine diciendo: "eso podría hacerlo yo, escribirlo yo, dirigirlo yo". Casi nadie podrá, pero bienvenido sea el intento si ello sirve para que luego venga Rodrigo García y lo mejore. Por cierto que el Sr. García no hace sino confirmarse como un director clave de nuestro tiempo, un artista sensible como pocos y sin problemas de sombras paternas. Yo, por mi parte, quedé tan fascinado que, tras esta terapia, intentaré como sea ir a "Be 'Tipul", buscar la referencia de la "madre" de la fascinante criatura. Cualquier buen psicoanalista indagaría en el origen de esta adicción, de esta sensación inefable ante "In Treatment", una maravilla de la que no merece perderse ni una sola sesión. (Pablo Kurt: FILMAFFINITY)






Los episodios duran 25 minutos, así que va perfecta para verla entre y entre quehaceres.

Por cierto, aquí una web super útil que muestra un calendario con el día y hora de retransmisión de los episodios de vuestras series y los próximos estrenos.

2 comentarios:

Paginador